Desarrollo del trabajo colaborativo
Es la línea encargada de investigar y desarrollar métodos para mejorar el trabajo colaborativo en el sistema FP Euskadi, tanto entre los equipos docentes, que deberán trabajar coordinados siendo un modelo para su alumnado, como entre los propios alumnos y alumnas, potenciando así su aprendizaje.
El objetivo principal es ofrecer recursos y acompañamiento para la implantación coherente y sistemática del trabajo colaborativo en los aprendizajes de alto rendimiento contribuyendo de esta manera al desarrollo del talento.
Esta línea es importante porque:
- Uno de los axiomas del modelo ETHAZI sostiene que, trabajando con otras personas, en colaboración, llegamos más lejos: el alumnado aprende más y mejor, y los equipos docentes desarrollan su labor con más efectividad.
- El uso del trabajo colaborativo como herramienta esencial para el aprendizaje del alumnado favorece su integración en los contextos sociales y profesionales cada vez más complejos, contextos en los que la interdisciplinaridad y la colaboración son factores clave.
- Creemos que el profesorado debe trabajar organizado en equipos docentes autogestionados para desplegar escenarios de aprendizaje de alto rendimiento; esta manera de trabajar contribuye a enriquecer la competencia docente propia.
Contemplamos el trabajo colaborativo en tres dimensiones que deben aplicarse de manera simultánea y coherente, ya que están interrelacionadas. Desde iTlent investigamos y transferimos conocimiento a los equipos docentes para que ellos lo desplieguen en los centros.
En primer lugar, impulsamos la cohesión de los equipos de trabajo para conocer quiénes y cómo somos en el equipo. Desarrollar el conocimiento mutuo y fomentar las interacciones entre personas ayuda a asumir las diferencias en el equipo facilitando la inclusión, y a desarrollar la solidaridad entre las personas del equipo. Investigamos en modos de relaciones que faciliten la cohesión y confianza, y, aquellos que aportan valor, los ponemos en acción en nuestras propuestas formativas.
Por otro lado, fomentamos el uso del trabajo colaborativo como una fabulosa herramienta para enriquecer el aprendizaje de las personas en comunidades de aprendizaje. Desarrollar la participación responsable de cada integrante del equipo ayuda a interiorizar la interdependencia como factor clave en el trabajo en equipo y a fortalecer la confianza en las decisiones que, como equipo, se llevarán a la acción.
Por último, en aras de la consecución de los objetivos comunes, el equipo debe tener claro cómo caminar hasta ellos. Proponemos a los equipos la creación de planes de equipo donde se refleje cómo quieren organizarse y de qué modo analizarán la sostenibilidad de sus procesos. Esta manera de trabajar ayuda a desarrollar la autorregulación individual y de equipo y a afrontar la gestión de conflictos como un aspecto inherente al trabajo colaborativo.